Por: Bernardo Mejía Arango
Toda esta historia comienza el día 30 de diciembre de 2021 cuando el día del funeral de Alcira: después de mucho haber averiguado por la familia de ella en las diferentes bases de datos (Como parte de mis investigaciones genealógicas) llegué a casa con la idea de renovar la búsqueda por sentir el vacío genealógico ajeno, el de Alcira ya toda la vida desde que yo recuerde, su ilusión era encontrar a la familia.
Cuál sería mi sorpresa cuando ingresé en los archivos Family Search (El centro de estudios familiares de la la "Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días" conocida mundialmente como Iglesia de los Mormones) y de "primera mano" encontré la partida de bautismo de Alcira en los archivos de la parroquia San Antonio de Padua en el municipio de San Antonio de Calarma en el departamento del Tolima. En el momento sentí mucha emoción pero igualmente me pareció algo extraño que luego de muchos intentos de encontrar algo relacionado con ella y su familia, precisamente el día de su funeral encontré su partida de bautismo, fue comienzo o "la punta" de una madeja de hilo que me llevaría a descubrir recientemente que Alcira lleva los genes de la familia Mejía: su abuela materna se llamó María Rita León Mejía.
La historia de Alcira ha estado ligada a la historia de las familias de mis tíos Luis Abel Arango Gómez y Ana Rita Mejía Arango. Por este hecho la historia de Alcira está ligada a la de mi familia ya que mis padres son hermanos tanto del tío Luis Abel como de la tía Ana Rita, pero sobre todo porque Elvia , mi madre fue criada en casa de los tíos por ser Luis Abel su hermano medio mayor y por haber muerto mi abuela materna María Delfina, cuando mi madre tenío solo 7 años; prácticamente Luis Abel quedó a cargo de sus hermanos, sobre todo los del segundo matrimonio del Abuelo Jesús María con mi abuela María Delfina.
Alcira llegó a casa de mis tíos Luis Abel y Ana Rita en Barragán, en las tierras altas de Tuluá, Valle del Cauca, en 1950. Los hermanos Arango Gómez, Luis Abel y Jesús habían llegado hacia 1923 de sus lugares de origen en Salamina y Marulanda respectivamente en el departamento de Caldas, se casaron y establecieron su familias en Barragán, al igual que el abuelo Jesús María Arango Mejía con su segunda esposa mi abuela materna María Delfina Duque Gómez y su prole: tanto los hijos de su primer matrimonio con Doña Pastora Gómez Vélez como con su segunda Esposa mi abuela María Delfina.
Barragán (San Juan de Barragán) es un corregimiento del municipio de Tuluá en el departamento del Valle del Cauca, Colombia. Dista de 3 horas de la cabecera municipal, Tuluá. Ubicado en la cordillera central. Es un corregimiento cuyas gentes se dedican a la ganadería, producción de Leche y al cultivo de Papa. Se encuentra a una altura de 2900 m.s.n.m. Su clima en el día es 14 °C, mientras en la noche puede llegar a los 4 °C. En su área se encuentra muchos páramos.Un grupo de caldenses entre los que se encontraban Gabriel, Telésforo, Santiago y Francisco Gómez Arango, hijos de la tía abuela María Dolores Arango Mejía, habían salido de sus tierras en Salamina Caldas, para buscar nuevos horizontes en las tierras del Valle del Cauca. En el grupo venían también Jesús María y Luis Abel Arango Gómez, el segundo, después de Aura Rosa, de los hijos del matrimonio del abuelo Jesús María Arango Mejía con doña Pastora Gómez Vélez, su primer esposa. LA historia completa se puede leer en el artículo que escribí el 20 de abril de 2011, se accede mediante el siguiente enlace.
Los Mejía Arango y Arango Mejía: Los Arango, un linaje de pobladores. Barragán, Valle del Cauca, una tierra de promisión. (bernardomejiaarango.blogspot.com)
Se cuenta tanto por la tradición oral de mi familia como por los vagos recuerdos de Alcira de su niñez, que su madre María Antonia Mirquez León (A quien Alcira recordaba con el nombre de María Antonia León) y ella de apenas 4 añitos, habían llegado en un día cualquiera de 1940 a la propiedad de un señor cuyo nombre era Juan Henao en una vereda llamada Peñas Blancas ubicada entre Barragán y Roncesvalles en el filo de la cordillera central.
Siempre ha sido un misterio, a la luz de lo se conoce hoy día, de como y bajo qué circunstancias llegaron Alcira y se madre hasta la finca de don Juan Henao en Peñas Blancas, procedentes de tu tierra natal San Antonio de Calarma (Conocida anteriormente como "San Antonio de los Micos"), teniendo en cuenta las circunstancias de aquella época en tema de vías carreteables y aún de las trochas y caminos de herradura, lo escarpado del terreno y las duras condiciones climáticas dada la altura de la cordillera central. La distancia por las vías carreteables hoy día es de 103 kilómetros. A raíz de mis investigaciones genealógicas, sabemos hoy día una gran parte de la historia en la que ya conocemos al menos sus orígenes y la composición de gran parte de su familia y sus ancestros.
En la finca de propiedad de Don Juan Henao en Peñas Blancas, la madre de Alcira de empleó en los oficios domésticos de la casa, donde falleció en un año que nadie recuerda, quedando Alcira no solo huérfana sino con vagos recuerdos de su origen los cuales afloraron a su memoria hacia el final de su vida por Causa de la enfermedad de Alzheimer; es una característica inicial que quienes comienzan a ser víctimas de esta enfermedad van perdiendo su memoria reciente y comienzan a tener dificultad para recordar lo inmediato o casi inmediato mientras que los recuerdos antiguos perdidos en sus subconsciente van aflorando.
De acuerdo con lo que le escuché cierta vez, ella decía que recordaba cuando había llegado con su mamá a la finca de Don Juan Henao. Recién me contaron que por las vivencias de Alcira y por ser huérfana era la usanza de la época, al menos en el campo que la vistieran con trajes de una tela especial y que los trabajadores de la finca se burlaban de ella por este motivo.
Se sabe igualmente por la tradición oral de la familia, que después de que murió Doña María Antonia la madre de Alcira, falleció la esposa de Don Juan Henao al servicio del cual estaban Alcira ya adolescente y su mamá. Se sabe que Don Juan Henao tenía alrededor de 10 hijos en su mayoría mujeres por lo cual se vio obligado, ya enfermo, a irse a vivir en un pueblo, y escogió Barragán por circunstancias que no se conocen.
En Barragán se planificaba la distribución de los hijos de Don Juan Henao ya viudo y enfermo de gravedad entre algunas familias del pueblo, resultando Alcira acogida provisionalmente en casa de una señora llamada Rosita de Naranjo, quien junto con el sacerdote del pueblo en aquella época buscaron una familia caritativa y de sanas costumbres donde pudieran depositar a Alcira al menos provisionalmente y así fue como mis tíos Luis Abel Arango Gómez y Ana Rita Mejía Arango la recibieron en su hogar. Corría el año de 1950 y a la luz de lo que se hoy día por mis investigaciones en genealogía, Alcira tenía 14 años. Allí, en el hogar de mis tío vivió 71 años hasta el día de su muerte el 30 de diciembre de 2021 cuando tenía 85 años.
De hecho la edad real de Alcira era desconocida en ese tiempo y las personas le calculaban una edad aproximada, entre ellas una mujeres de Barragán de apellido Galindo (Que eran tres, dos de ellas profesoras y quienes eran queridas y respetadas en el pueblo); las Galindo, desconociendo los orígenes reales de Alcira y asumiendo que no estaba bautizada, le hicieron recibir el sagrado sacramento del bautismo mediante el cual le fue dado el nombre de MARIA ALCIRA MILQUEZ, igualmente en esta partida de bautismo quedó consignado que era hija de María Antonia Milquez, figurando como sus abuelos maternos a Venancio Milquez y María Rita León. No se menciona nada del padre.
.) muestra la segunda y actual iglesia de Barragán.
Es muy probable que Alcira, de acuerdo con la cronología que hemos venido siguiendo, haya recibido el sacramento del bautismo que se menciona más adelante en la primer iglesia, que fue destruida por un incendio en una fecha de la que nadie me ha dado razón. Los archivos se salvaron porque los originales eran enviados a parroquias de Tuluá, principalmente a la parroquia de Nuestra Señora del Carmen adjunta al convento de los Franciscanos en Tuluá. Igualmente registros parroquiales eran enviados a la Parroquia de San Bartolomé, en Tuluá.
Aquel bautismo de Alcira en Barragán quedó registrado en el libro de bautismo 3, folio 216, numero 644 de la Parroquia de San Juan de Barragán en Barragán, Tuluá, Valle del Cauca, Colombia. Después fue anulado como lo presentaré más adelante, incluyendo los motivos.
Muy seguramente la madre de Alcira alcanzó a contar parte de sus vivencia anteriores en el pueblo natal de Alcira, San Antonio de los Micos (Nombre en el vocabulario popular y cuyo nombre verdadero es San Antonio de Calarma). La información oral por diversas circunstancias llevó a que Alcira fuera llamada como se mencionó antes: María Alcira Milquez, nombre que ella nunca aceptó, Ella decía que se llamaba ALCIRA NARANJO LEON y que sus padres eran MEDARDO NARANJO y MARIA ANTONIA LEON.
La partida de bautismo que se muestra en la imagen, aparece anulada. La causal de anulación se discutirá un poco más adelante.
En esta partida de bautismo con fecha 27 de septiembre de 1953 (Parroquia San Juan de Barragán, Libro 3 de bautismos, folio 216, numero 644) se le asigna a Alcira el nombre de MARIA ALCIRA y apellido MILQUEZ y se le calculó una edad de 18 años. En realidad tenía 17 años.
Desde su llegada a la casa de los tíos Luis Abel y Ana Rita, paulatinamente Alcira se fue integrando a las actividades familiares; Alcira siempre fue "motora" en las navidades con la natilla y el arequipe y otras delicias de la gastronomía navideña los cuales aprendió muy bien de la tía Ana Rita, experta en estos temas, siempre recordaré las coladas y sobre todo las "panelitas de leche" cuando todavía mi tía era una mujer enérgica y podría estar al frente de la casa; paulatinamente su salud se fue desgastando por causa de la diabetes y Alcira fue asumiendo todas estas actividades. Y lo hizo muy bien.
Durante el Gobierno del General Gustavo Rojas Pinilla, en 1958 se promulgó una ley que les permitía a las mujeres tener Cédula de Ciudadanía. Hasta ese entonces las mujeres y los indígenas eran considerados menores de edad y no se les permitía tener cédula. Y cuando le tocó el turno a Alcira de tramitar su cédula de ciudadanía Ella hizo valer lo que en su mente tenía como cierto: que su nombre era ALCIRA y que sus apellidos eran NARANJO LEON y así quedó escrito. Esto le traería un problema con el transcurrir de los años: al momento de tramitar la pensión, su "partida de bautismo" de Barragán tenía datos diferentes de los de su cédula de Ciudadanía.
La fotografía de la izquierda es tomada en Buga en la carrera 13, a comienzos de la década de 1970: aparece a la izquierda Alcira, le sigue Estella Bejarano y luego José María Barrera hijo Barrera hijo a quien todos conocimos como "Chepe" (Hijo de Doña Carmen de Barrera y de de Don José María Barrera "compadres" de los tíos Luis Abel y Ana Rita al igual que de mis padres Arturo y Elvia, por ser padrinos de Jesús María Arango Mejía, hijo de los tíos, y de Jairo Mejía Arango mi hermano). Alcira era una persona muy sociable, además de integrarse bien dentro de la familia donde era querida y respetada, las personas que por uno u otro motivo frecuentaban la casa de los tío Ana Rita y Luis Abel, terminaban integrando el grupo de amigos de Alcira.
La fotografía del centro en tomada el 10 de diciembre de 1988 en la boda de Amanda Mejía Arango, mi hermana, la menor de 12 hermanos. Tenía Alcira 52 años a la luz de lo que sabemos hoy día de su origen. La fotografía de la derecha fue tomada alrededor de 1970.
Y a partir de que Alcira fuera acogida en el hogar de los tíos Luis Abel y Ana Rita, allí vivió hasta el fallecimiento de la tía; prácticamente Alcira "llevó la batuta" de los quehaceres de la casa, participó en la crianza de casi tres generaciones, acompañó a la tía Ana Rita hasta su muerte el 24 de enero de 1976. Alcira siempre estuvo pendiente de los quehaceres en las navidades con las deliciosas comidas y postres que preparaba, entre ellos la infaltable natilla y el arequipe. Para el cumpleaños de cada uno de nosotros siempre tenía un detalle.
Cuando yo nací el 31 de mayo de 1951 mi mamá estaba temporalmente en casa del mis tíos Luis Abel y Ana Rita en la casa de la carrera 13 entre calles quinta y cuarta en Buga. Allí estaba Alcira acompañando a mi mamá en su proceso de recuperación post parto y en la etapa inicial de mi crianza. Lugo cuando nació mi hermana Amanda el 13 de noviembre de 1964 en la casa de la carrera quinta con calle novena de Buga , Alcira aceptó amablemente por instrucciones de la tía Ana Rita, hacerse cargo de las labores de la casa y de cuidar el puerperio de mi mamá y así fue como la tuvimos en nuestro hogar durante más de dos meses luego del nacimiento de Amanda.
En la fotografía de la izquierda en una de las navidades relativamente recientes. Todavía gozaba de buena salud no obstante que ya era al "olvidadiza" por causa de la enfermedad de Alzheimer. En la fotografía de la derecha estamos Alcira y yo preparando el famoso arequipe en una de las navidades en casa de Libia Arango Mejía, donde vivió sus últimos años.
Con el fallecimiento de la tía tía Ana Rita se produjo el cierre de la casa materna y paterna de los tíos y Alcira se fue a vivir a Bogotá, inicialmente en Casa de Cecilia Arango Mejía y de sus esposo Ricardo Henao Gómez; esto fue solo durante un tiempo porque Alcira comenzó a trabajar; primero en la portería del edificio donde vivía Jesusita Martínez, amiga de Cecilia. La vivienda de Alcira en el edificio donde trabajaba, no obstante lo reducida en espacio, se volvió el sitio de reunión de todos quienes estábamos en Bogotá por esa época: Luz Virginia con su familia, las hijas de Libia Arango Mejía en la universidad y algunos de sus amigos y luego yo, estaba haciendo mi especialización en Patología en la Universidad Nacional de Colombia.
Después vivió con Luz Virginia Arango Mejía hermana menor de Cecilia. Nelson Bernal era en ese entonces pretendiente de Luz Virginia y le consiguió un empleo en una empresa productora de pan y sus afines. Alcira vivió en el apartamento de la carrera 13 con calle 42 (El que inicialmente fuera de propiedad de Cecilia Arango Mejía y su esposo Ricardo Henao Gómez quienes se fuero a un nuevo apartamento de la calle 63 con carrera séptima también en Bogotá).
Pues el apartamento de la 42 fue testigo de muchas vivencia de quienes lo frecuentábamos, con la "supervisión" de Alcira quien continuaba con su trabajo en la panificadora. En el que permaneció hasta que logró completar el tiempo necesario para tener derecho a la pensión de jubilación. Entonces se regresó a Buga.
A su regreso de Bogotá y ya disfrutando de una modesta pensión (La cual fue muy difícil de obtener debido a las inconsistencias que se mencionaron antes entre su cédula de ciudadanía y su partida de bautismo en Barragán) Alcira vivó en casa de Libia Arango Mejía, con excepción de algunas temporadas en hogares geriátricos debido a que Libia debía desplazarse a España para atender asuntos de salud de una de sus hijas y para realizar trámites de su nacionalización en ese país; en la fotografía de la derecha ya se nota es desgaste físico por causa de la enfermedad , la que finalmente se la llevaría de este mundo.
Pera cuando llegó el trámite de su pensión, Alcira y quienes le ayudaron en el proceso se encontraron con las inconsistencias entre su partida de bautismo tramitada en Barragán en el año de 1953 y su cédula de ciudadanía, los documentos tenían nombres y apellidos que no coincidían como lo mencioné Antes.
Gracias a los oficios de Libia Arango Mejía ante el obispo de turno de Buga, se logró modificar la información contenida en la primer partida de bautismo (la de Barragán) con la información de su cédula, Por eso la partida de bautismo mostrada inicialmente en este artículo fue anulada y el Tribunal Eclesiástico de la Diócesis de Buga emitió una nueva, que está contenido en el libro de reposiciones número 1, folio 204:
Así pues, Alcira tenía en cierta forma su "segundo bautismo" o al menos su segunda partida de bautismo la cual siguió ocultando la verdadera información, porque yo encontré la primer partida de bautismo (En su pueblo natal San Antonio en el departamento del Tolima) y toda una información genealógica real que me llevó a encontrar la información, además del nacimiento de ella, mucha de la concerniente por línea paterna y materna en su pueblo natal San Antonio de Calarma en el Departamento del Tolima, Colombia, al igual de la información varios de sus tías y tíos por parte de ambos padres; de igual manera de los hermanos de Alcira. A tal punto llegaron mis investigaciones, que hoy día sabemos que Alcira es descendiente de Mejías. Todo probado con documentos bautismales, partidas de matrimonio y defunciones inclusive. Por eso y como lo digo en el titular de este artículo "Alcira, ahora más que nunca está en nuestra familia".
Este es la parida de bautismo de Alcira cuyo bautismo se efectuó 268 días después de haber nacido en el hogar conformado (Según partida de matrimonio de sus padres) por MEDARDO NARANJO ESTRADA y MARIA ANTONIA MIRQUEZ LEON Parroquia San Antonio de Padua, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia libro 14 de bautismos (1935-1938), folio 191, numero 379 El libro 14 está contenido en un volumen con las partidas entre 1911 y 1950.
De acuerdo con lo anterior y no obstante las modificaciones posteriores el nombre real de Alcira es ALCIRA MIRQUEZ LEON.
P
artida de matrimonio de los padres de Alcira Naranjo Mirquez: Medardo Naranjo Estrada con María Antonia Mirquez León. Parroquia San Antonio de Padua, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia. Libro 2 de matrimonios folio 255, numero 510.
Este es la partida de defunción del padre de Alcira, Medardo Naranjo Estrada, en dicha partida consta que Medardo Naranjo Estrada falleció en Ibagué el 28 de enero de 1981. En resumen los padres de Alcira se habían separado desde 1940 cuando ella apareció en la propiedad de Don Juan Henao en la vereda Peñas Blancas cerca de Barragán en el Valle del Cauca. Y muy probablemente se habían separado en San Antonio o se vinieron a vivir a Ibagué y allá María Antonia, la madre de Alcira, muy probablemente decidió abandonar el hogar, nada se sabe con certeza.
Y como lo dice Alba Marina Arango Mejía más adelante en algunas notas personales, "la vida de Alcira se fue apagando......apagando......como una velita", proceso muy evidente durante sus sus últimos cinco años en que hubo que recurrir a hogares geriátricos para sus estadía y por lo delicado de su enfermedad, hasta de que Libia María Arango Mejía, una de las hijas mayores de los tía Luis Abel y Ana Rita, cuando regresó de España (Como se mencionó antes) tomó la decisión de llevársela consigo para su casa de la calle segunda numero 12-50 de Buga donde gozó de los cuidados, del amor y del aprecio de los hijos del tío Luis Abel y de la tía Ana Rita (Quienes la habían acogido en su hogar en Barragán 71 años atrás) al igual que de las hijas de Libia con quienes había convivido en la época en que vivió en Bogotá, lo mismo que de los hijos de los demás componente de la familia de los tíos Luis Abel y Ana Rita, allá pudieron retribuirle, al menos en parte, mucho de lo que Alcira les había dado en sus años de juventud y aún de la edad madura.
Allí, en la casa de Libia María Arango Mejía, el 30 de diciembre de 2021, Alcira Naranjo Mirquez entregó su alma al Creador.
COMO ESTABAN COMPUESTAS LAS FAMILIAS DE LOS PADRES DE ALCIRA (MEDARDO Y MARIA ANTONIA)
LOS ABUELOS PATERNOS DE ALCIRA
Medardo Naranjo Estrada, el padre de Alcira, era el cuarto de nueve hijos de Ezequiel Naranjo Cubillos y de Susana Estada Márquez (Los abuelos paternos de Alcira). O sea que Alcira tuvo (Hasta donde se sabe) 8 tíos por parte del padre Medardo Naranjo Estrada.
- Félix Antonio Naranjo Estrada, nacido el 21 de febrero de 1903, Ibagué, Tolima.
- Hipólito Naranjo Estrada, nacido el 12 de agosto de 1906, Ibagué, Tolima.
- Domingo Naranjo Estrada, nacido el 11 de junio de 1908, Ibagué, Tolima.
Casado el 10 de junio de 1932, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia, con Visitación Moreno. - Medardo Naranjo Estrada, nacido en 1911, fallecido el 28 de enero de 1981, Ibagué, Tolima, Colombia (a la edad de 70 años). Casado el 27 de junio de 1932, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia, con María Antonia Mirquez León.
- Rosa Naranjo Estrada. Casada con Calixto Romero..
- Edelmira Naranjo Estrada, nacida el 29 de abril de 1910, San Antonio de Calarma, Tolima.
- Ana Julia Naranjo Estrada. Casada con Luis Alfonso Barragán.
- Ezequiel Naranjo Estrada, nacido el 28 de agosto de 1913, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia.
- Isabel Naranjo Estrada, nacida el 3 de noviembre de 1916, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia.
LOS ABUELOS MATERNOS DE ALCIRA
María Antonia Mirquez León, la madre de Alcira, se contaba entre los cuatro hijos (Encontrados hasta el momento) de Venancio Mirquez y de Ana Rita León Mejía, (Pero no se saben hasta el momento fecha y lugar de nacimiento de María Antonia como tampoco se sabe donde la fue depositado su cadáver ni la fecha de defunción). De acuerdo con las siguiente lista, Alcira tuvo tres tíos maternos (Dos mujeres y un hombre):
- María Antonia Mirquez León. Casada el 27 de junio de 1932, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia, con Medardo Naranjo Estrada, nacido en 1911, fallecido el 28 de enero de 1981, Ibagué, Tolima, Colombia (a la edad de 70 años) . Se desconoce la fecha de fallecimiento, por lo menos no se encuentra ni en Barragán ni en Roncesvalles.
- Teodolinda Mirquez León, nacida en 1916, Chaparral, Tolima, Colombia, fallecida el 4 de enero de 1995, Ibagué, Tolima, Colombia (a la edad de 79 años) . Casada con Pablo Emilio Capera..
- Reinaldo Mirquez León, nacido en 1918, Chaparral, Tolima, Colombia.
- Chiquinquirá Mirquez León, nacida el 20 de noviembre de 1921, Ortega, Tolima, Colombia.
LOS PADRES DE ALCIRA
Descendientes de Medardo Naranjo Estrada y María Antonia Mirquez León
Medardo Naranjo Estrada, nacido en 1911, fallecido el 28 de enero de 1981, Ibagué, Tolima, Colombia (A la edad de 70 años). Se desconoce la fecha de nacimiento y de fallecimiento de María Antonia Mirquez León; Medardo y María Antonia contrajeron matrimonio el 27 de junio de 1932, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia. Hijos:
- Félix Antonio Naranjo Mírquez, nacido el 21 de octubre de 1932, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia.
- Teresita Naranjo Mirquez, nacida el 3 de noviembre de 1933, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia.
- José Medardo Naranjo Mirquez, nacido el 13 de octubre de 1934, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia..
- Alcira Naranjo Mirquez, nacida el 12 de junio de 1936, San Antonio de Calarma, Tolima, Colombia.
- Guillermo Naranjo Mirquez, nacido el 22 de noviembre de 1938, San Antonio de Calarma. Tolima, Colombia.
Muchas preguntas surgen de todo los que les he mostrado hasta el momento y que es producto de una investigación en los archivos parroquiales de varios pueblos y ciudades:
1. Si Medardo y María Antonia se casaron el 27 de junio de 1932 y Félix Antonio el primero de los hijos del Matrimonio nació el 21 de octubre del mismo año, Doña María Antonia estaba en embarazo cuando contrajo matrimonio. El embarazo antes del matrimonio era socialmente condenable en esa época. Acaso se casaron bajo presión?
2. Si Alcira llegó a la propiedad de Don Juan Henao en 1940, tenía 4 años a la luz de lo que sabemos con certeza hoy día, pero no se sabe nada del hermanito menor que Alcira nacido en 1938.
3. Qué sucedió con los demás hermanos de Alcira?
4. Si el padre de Alcira Medardo Naranjo Estrada falleció en 1981 en Ibagué, porqué la madre de Alcira, María Antonia Mirquez León se apareció en la propiedad de Don Juan Henao en 1940. Esto sugiere que abandonó el hogar llevándose al menos a uno de los hijos: Alcira.
Los Mejía en Colombia descendemos de Don Juan Mejía de Tovar Montoya, proveniente de familia noble de Villacastín, Segovia en Castilla y León, España. Don Juan Mejía de Tobar viajó a Indias cuando tenía entre 17 y 19 años (Entre 1602 y 1605). Se cree que llegó primero a Cartago (En el Valle del Cauca), ciudad que mantenía mucho comercio con Santafé de Antioquia y por eso se cree que allá fue a parar Don Juan, donde en 1608 contrajo matrimonio con Doña Elvira Ramírez de Coy y Sánchez Torreblanca.
En 1608 montó en Santafé de Antioquia una escuela y luego, con el tiempo, llegó a tener un próspero negocio de arriería, el cual cubría entre otras rutas al vía a Puerto Nare en el Valle del Magdalena. Después se compró un hato en el Valle de Aburrá, allí murió en 1664.
Don José Joaquín de León y doña Magdalena Mejía (Los bisabuelos maternos de Alcira) provienen de una rama de los Mejía que se estableció en Santander, específicamente en Charalá, muy probablemente de Mejías que se establecieron allá procedentes de Valle de Aburrá en Antioquia.
Por la deuda de gratitud que la familia de mis tíos Luis Abel y Ana Rita e indirectamente la familia de mis padres Arturo Mejía Arango y Elvia Arango Duque, me sentí motivado no solo buscar sus ancestros sino a conocer el entorno de su pueblo natal San Antonio de Calarma, conocido coloquialmente como "San Antonio de los Micos" y a llevar en peregrinaje sus cenizas allá, no para dejarlas sino como un homenaje póstumo al conocer definitivamente su procedencia y un poco (En ese entonces) de su familia, algo que los tíos Luis Abel y Ana Rita nunca lograron a pesar del intento que hicieron. Era muy vaga la idea que Alcira guardaba en su mente de lo que siendo niña escuchó, según me cuenta Cecilia, la mayor de sus hijo de los tíos Luis Abel y Ana Rita) de labios de su madre María Antonia.
San Antonio de Calarma es un municipio situado en el sur-occidente del Departamento del Tolima, fue fundado el 13 de junio de 1825 pero siempre estuvo integrado a la historia del municipio de Chaparral del cual adquirió la categoría de corregimiento en 1905, año en el cual se le da el nombre de San Antonio de Calarma, conocido hasta entonces como San Antonio de los Micos, nombre que nada tiene que ver con animal alguno sino mas bien por su relación con Pedro Miccus de quien se dice que fue uno de sus fundadores. Los Miccus, la familia de origen italiano del colono Pedro Miccus, se fueron de Bogotá en 1820 a la región donde hoy es el municipio de San Antonio. El 28 de marzo al convertirse en municipio mediante ordenanza numero 21 del gobierno del Departamento del Tolima, San Antonio se independizó de Chaparral.
San Antonio de Calarma está situado a 1.450 metros sobre el nivel del mar, tiene una temperatura promedio de 23 grados centígrados. Por su situación geográfica, sus áreas rurales son ricas en fauna y flora (sobre todo árboles maderables).
Pues entre el 17 y el 18 de enero de 2022, en compañía de Libia Arango Mejía y de Lucía Toro Arango, nos fuimos a San Antonio de Calarma en el Tolima llevando las cenizas de Alcira, en el momento de hacer pública esta crónica, en sentido estricto y como genealogista, la investigación de Alcira y su familia no termina aquí, me propongo entrar en contacto con los descendientes de Medardo Naranjo Estrada y sus hermanos, el padre y los tío paternos de Alcira.
Panorámica actual de San Antonio de Calarma en el Departamento del Tolima (Fuente: Blog Pidaru: San Antonio Tolima Emporio Cultural del Sur)
Iglesia San Antonio de Padua, San Antonio de Calarma, Tolima Colombia, La fotografía de la izquierda data del 1930, año muy cercano al año en que nació Alcira (1936). Por la época a la cual corresponde la fotografía, se desarrollaba la historia de la familia de Alcira en San Antonio. Sus padres se casaron en esta iglesia en 1932 y allá fueron bautizados Alcira y sus hermano entre 1932 y 1938. La fotografía de la derecha corresponde al 18 de enero de 2022. En el frente de la iglesia hay una placa que dice que el atrio de la iglesia fuer concluido e inaugurado en 1941. (Fuente y derechos de autor de la fotografía de la izquierda: Blog "San Antonio Tolima: San Antonio desde la Conquista hasta nuestros días, primera parte" En las fotografías, Bernardo Mejía Arango (El autor de este artículo) con Libia Arango Mejía y Lucía Toro Arango, 18 de enero de 2022.
Recorrimos un poco el pueblo ese 18 de enero de 2002 hablando con algunos parroquianos a quienes preguntamos por los Naranjo y sobre los Mirquez. Había transcurrido mucho tiempo desde los comienzos de esta historia y en San Antonio quedan muchas personas de apellido Naranjo, ajenas desde luego con sus antepasados estuvieran involucrado en esta historia o no. De los Mirquez, varios nos comentaron que en la casa donde hoy quedan unas oficinas de telefonía celular, aproximadamente a dos cuadras de la iglesia, vivieron una mujeres de apellido Mirquez, las que paulatinamente fueron abandonando el pueblo, Seguramente se eran doña María Antonia, la mamá de Alcira y sus hermanas Teodolinda y Chiquinquirá (Ver el listado más arriba), muy seguramente doña Maria Antonia inició este éxodo.
En la puerta principal de la Iglesia San Antonio de Padua, en San Antonio de Calarma. En 2022 cuando estuvimos allá con las cenizas de Alcira, aún no estaba tan avanzado en las investigaciones sobre su familia. Intenté revisar los archivos pero no me lo permitieron. El Sacerdote estaba recién llegado a un pueblo que antes no conocía, no tenía idea todavía de sus feligreses, menos de los archivos parroquiales y aún no había entrado en contacto con la gente del pueblo. Eso si, cuando le contamos el asunto que nos motivó a ir hasta San Antonio, ordenó abrir la Iglesia para que oráramos con las cenizas presentes de Alcira allí. En ese bautisterio que se observa a la derecha un día de 1936 la bautizaron, por esa puerta de esa iglesia entró siendo una bebé y por allí salió bautizada y por allí entraron y salieron sus cenizas al cabo de 85 años. Bonito epílogo, nos sentimos bien por cerrar en cierta forma "con broche de oro" la historia de la vida de Alcira, aunque esto no es completamente cierto: me propongo entrar en contacto con los descendientes de los tíos y quizá de los hermanos de Alcira.
Las cenizas de Alcira se colocaron unos momentos en el altar mayor de la Iglesia de San Antonio de Padua en San Antonio de Calarma su pueblo natal y luego en un altar colateral en la misma iglesia enfrente del "Santísimo" y allí Libia y Lucía oraron por su alma. Bueno, yo también.
Como dato curioso y relacionado con nuestra familia, en San Antonio de Calarma vivió Juan José Gómez Arango con su familia. Juan José, hijo de la tía abuela María Dolores Arango Mejía (Hermana de nuestro abuelo Jesús María, casada con Telesforo Antonio de los Dolores Gómez Duque). Juan José, su esposa Nohemy Salazar Gómez y sus cinco primeras hijas: Gloria Amparo, Luz Elena, Alba Marina, Melba María y Doris Cecilia se fueron allá con la promesa de un trabajo en un aserradero para Juan José, promesa incumplida y el jefe del hogar tuvo que ponerse primero a montar una fábrica de gelatina de pata de res para sobrevivir y luego emplearse en una finca productora de café como experto en el manejo de los arbustos.
En la fotografía, de izquierda a derecha: Juan José Gómez Arango, Nohemy Salazar Gómez. Le siguen en su orden Gloria, Luz Elena, Alba Marina, Melba María, Doris Cecilia y Elda Esperanza; esta última nació en San Antonio de Calarma el 14 de agosto de 1969, a pesar del hecho de haber vivido allá, esta familia fue y sigue siendo ajena al igual que lo hemos sido todos, del origen y la historia de Alcira en ese pueblo, San Antonio.
Todas estas peripecias nos las contaron Melba María y su madre Nohemy en una invitación a almorzar en su casa situada en la "Calle de la escopeta" en el centro de Cali. Allá estuvimos Luz Virginia y yo, no hace mucho. Bueno, de San Antonio en el Tolima, Juan José y la familia salieron nuevamente al Valle del Cauca, gracias a su hermana Ana Luisa Arango Gómez quien les envió el dinero necesario para el viaje de regreso.
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"En las vacaciones del año 50 del siglo 20 - yo, estudiaba en Popayán- Por esa época, llegó Alcira a mi casa paterna y se quedó con nosotros hasta el 30 de diciembre del 2021. Total 71 años con la familia Arango y Mejía. Una larga vida, para compartir con ella alegrías y dificultades que tenemos los humanos, al hacer el camino en el planeta tierra. Todo esto, hace que algunas personas adquieran derechos de fraternidad. Y así fue. Cuando murió Alcira, - ese 30 de diciembre- Todos lloramos por su ausencia y sus recuerdos. Y seguimos recordándola como se recuerda a una hermana. Nuestros hijos, sobrinos y primos la recuerdan como una tía amable y afectuosa. Siempre fue una mujer que se distinguió por sus modales y buena educación familiar como le enseñaron mis padres. Ella siempre demostró amar a esta familia, especialmente a mis padres. Y nunca quiso alejarse , por más que la invitaron para otras casas.
Esta fue Alcira Naranjo en mi casa paterna y en nuestra familia. Su nombre y sus recuerdos van muy unidos a todos nosotros.
Ahora , oramos por su alma, como lo hacemos por todos los nuestros que pasaron a la eternidad".🙏
Cecilia Arango Mejía
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"Alcira fue una mujer muy especial para nosotros, es especial para mi, porque yo estaba muy pequeña, por ahí de cinco años cuando Alcira llegó a la casa, eso creo. Fue una persona que ocupó el puesto de acompañante de nosotros, como decir la nana, estaba pendiente de la ropa, la comida, de muchas cosas de la casa pues reemplazaba a mi mamá en todo eso y fue mucha compañía, si, le tuvimos gran aprecio, realmente era parte de la familia. Fueron tantas cosas de Jesús y yo, tuvimos gran parte de la vida con ella. Hasta el día que me fui a casar, Alcira, estaba en casa. Fueron muchos acontecimientos, Alcira era muy cariñosa, ella estaba en todo, le gustaba conocer, aprender, conversar con uno; era muy especial en la
la música clásica; cuando hice el viaje a Europa, le traje un regalito de Bonn, la ciudad donde nació Beethoven, allá la primera de quien me acordé fue de ella, me acordaba que ponía esa música, y bueno, era una mujer muy alegre, quería estar en todo y sabérselo todo; de pronto los temperamentos no eran iguales el mío con el de ella. Fue una mujer que llenó mucha parte de la vida de nosotros. La quisimos mucho. Me tocó acompañarla hasta casi los últimos días de su vida. Me tocó en la pandemia por Covid-19, yo bajaba por estas calles solas a ayudar a Libia, a acompañar a Libia, a ayudar a cambiar a Alcira pues como nadie podía ir en esos días y en esos meses entonces yo estuve pendiente. Ella se fue apagando como la velita, se fuer mermando.......mermando. Ella era muy afectuosa, muy cariñosa, de pronto lo cuidaba a uno demasiado........"
Alba Marina Arango Mejía
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"Alcira fue un ser especial. Sin haber sido madre, tenía un gran instinto maternal, que tanto apreció la familia Arango Mejía, sobre todo la segunda generación que la quisimos como una tía y particularmente yo que la encuentro en la mayor parte de las memorias de mi niñez. La recuerdo como una mujer fuerte, tenaz, decidida, cariñosa y compasiva"
Andrés Henao Arango
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"Recuerdo a Alcira como una persona fuerte de carácter, bondadosa, solidaria, siempre pensando en los demás, menos en ella, Creo que todos los que vivimos cerca de ella tenemos una deuda de gratitud"
Gloria María Mejía Arango
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"Alcira: fuiste un ángel mandado por Dios para que formaras parte de nuestra vida. Siempre contamos contigo. La mujer que nos dedicó tanto tiempo y educó con tanto amor. Gracias por estar siempre allí, por tener siempre ese corazón tan grande, dabas de lo que no tenías por complacernos; fuiste como una madre, siempre con una voz de aliento para mi, fuerte cuando lo necesité, gracias. Estarás conmigo por Siempre"
Guido Toro Arango
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"Yo tengo gratos y muchos recuerdos de Alcira: comienzo por Tuluá, cuando el tío Luis Abel y la tía Ana Rita me llevaron de Barragán a estudiar a los Salesianos, ahí estaba Alcira y era la que nos levantaba para ir al colegio, además nos tenía muy buena comida y era la que hacía todo, esto era en los altos del Banco de Colombia frente a La Viña. Luego cuando vivíamos en Zarzal yo me fui a trabajar con el tío Luis Abel a Buga en la carnicería y madrugaba a las 5 a.m. Alcira me tenía desayuno, igualmente era la que hacía todo en la casa, siempre de buen genio, amable, parecía una mamá con todos. Recuerdo que cuando ya vivíamos en Santa Rosa de Cabal con Nilsa, recién casados, ella fue y se estuvo con nosotros unos días, fuimos una vez a pescar con ella por los lados de termales y seguía siendo la misma persona. Lástima que nosotros ya viviendo en Ibagué no sabíamos de los orígenes que Alcira tenía en San Antonio, ya que yo tenía varios clientes cafeteros allí y viajé muchas veces para visitar a esos clientes, ahí habría podido investigar un poco. Quedé muy sorprendido con los informes de Bernardo de que Alcira tiene parentesco con nosotros, me hubiera gustado haberlo sabido antes y haber disfrutado con ella en vida. Dios la tenga en su gloria".
Libardo Mejía Arango
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"Yo creo que mi tía Ana Rita en Algún momento le inculcó a mi papá el respeto y admiración por Alcira porque Él siempre nos decía a nosotros que ella merecía todo nuestro respeto y admiración. Nosotros al comienzo no entendíamos bien esto pero hoy creo que fue algo que Él aprendió en si juventud y siempre nos lo dijo a nosotros. Nosotros siempre lo pusimos en práctica y ella siempre fue muy afectuosa con nosotros"
Juan Carlos Mejía Restrepo
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"Cuando íbamos de vacaciones a Buga, aunque siempre llegábamos donde mi tío Arturo, la tía Ana Rita nos programaba tomar los algos en su casa y quien nos preparaba cosas ricas era Alcira. Ya cuando fuimos siendo grandecitas fuimos entendiendo que ella era para la familia Arango Mejía un Ser muy especial y que se conocía el rodaje de la casa, a ella le pedíamos lo que necesitáramos, siempre ha formado parte de nuestros recuerdos"
Myriam Mejía Restrepo
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"La perspectiva que yo pueda tener de Alcira es muy distinta a la de mis hermanas mayores, porque cuando yo nací ella ya vivía en la casa hacía muchos años, era la única que quedaba del grupo de personas que ayudaban a mamá. Para mi siempre estuvo y era parte de la familia como una hermana mayor que había que obedecer porque imagino que por orden de mis padres era muy vigilante, prácticamente era como la mamá que me atendía y enseñaba las actividades de la vida diaria como cepillarme los dientes, peinarme, ducharme, comer, vestirme, ponerme zapatos, amarrarme los cordones, era quien me servía el tetero hasta que lo dejé a los 5 años
Aprendí a comer lo que nos servía. Por si estaba de malgenio nos servía la comida que preparaba para mamá por ser diabética y ser diabética: solo eran hervidos. Y me mandaba a lavar los tenis. Cuando estaba de buen genio se esmeraba en preparar comida sabrosa y darnos gusto con helados, dulces y postres.
Mis compañeras de colegio que pasaban a recogerme por la mañana todavía la recuerdan por que les daba arepa con mantequilla y queso.
A mi no me dejaba ni a sol ni a sombra. Me acompañaba toda la vida a misa. al cine, a la fuente de soda y más si andaba con pretendientes o novio. Nos llevábamos bien. Nunca le contesté de mala gana, le obedecía en todo, yo sabía que ella era la autoridad cuando no estaba mamá y además la quería mucho. Empatizamos en gustos musicales y en artistas de moda, de películas, telenovelas, fue muy condescendiente conmigo e incondicional.
Nunca le ponía quejas a mi mamá, nos queríamos y respetábamos mutuamente. Atendía muy bien a mis novios hasta que me hicieran algo porque los borraba del mapa hasta recortarlos de las fotos donde aparecían.
Era muy apasionada y celosa, si le cogía ojeriza a alguien como decía ella, lo "borraba del mapa".
Solo tengo palabras de agradecimiento para ella y lindos recuerdos.
Cuando fui a vivir a Bogotá ya separada del papá de mi hija mayor, ella se encargó de la niña para recibirla del bus y darle las comidas hasta cuando yo llegara a recogerla. Cuando tuve mis segundos hijos también estuvo muy pendiente de ellos, se fue a vivir con nosotros varios años y se encargó de ellos. Creo que conmigo y con mis hijos es con la que más compartió de todos mis hermanos. Mis hijos la aman y recuerdan con mucho cariño.
Sabemos que nos protege desde el cielo, junto con nuestros padres, hermano y tíos que se nos han adelantado".
Luz Virginia Arango Mejía
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"Alcirita fue única para nosotros, nana, tía, madre y amiga. ¡Entrega total! Ejemplo de servicio, valores y moral. Formadora de fé. Llena de amor y de humildad. Amaba profundamente nuestra familia y cuando digo nuestra, incluye toda la familia Arango Mejía, Mejía Arango, los Mejía Restrepo y a Chepito y Luz Mila. La dicha más grande para ella era atender a cualquiera de nosotros. Siempre quería hacer sancochos. En diciembre solo pensaba en la natilla y el arequipe para prepararlo en casa, es el espíritu navideño más alegre que he conocido. Para mi, "Alcirita es un ejemplo de amor puro". Mi vida está llena de hermosos recuerdos compartidos con ella. Disfruté de su amor en todas las etapas de mi vida".
Martha Toro Arango
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"Si...nuestra Alcirita fue puro amor. Amaba la música. Escuchábamos a Richard Clayderman y hablábamos de la hermosura del arreglo musical que tenían todas las melodía de él. Siempre que lo escucho, que es con frecuencia, lo hago con Alcirita en mi corazón. También le encantaba Rafael, el cantante español."
Libia María Arango Mejía.
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"Alcirita como la llamaba yo, era una mujer maravillosa quien siempre dio lo mejor de ella sin esperar nada en retorno. Nunca olvido cuando me llamaba a casa cada vez que yo volvía a Colombia, para invítame para unos frijoles, sancocho, buñuelos, majar blanco y cualquier cosa deliciosa. Siempre la llevo en mi corazón y nunca olvido que me decía que le encantaría que nunca cambiara aun habiendo estado fuera del país por tantos años. Esto fue un buen legado que aprendí con ella acerca de la importancia de quererte a todas las personas sin importancia de raza, color, situación económica o cualquier otra deferencia. Es algo que me ha ayudado a través de todos estos años para ser mejor mamá, esposa, amiga y líder en compañías grandes o pequeñas"
María Carolina Gerstein Toro
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Yo tengo muchos recuerdos de Alci pero lo que más recuerdo es su amor, respeto y consideración por mi abuelita Ana Rita y la admiración que sentía por mi tía Cecilia desde niña, el amor y el espíritu de servicio que tenía para con toda la familia y su lealtad para con la familia y sus amigos, era alguien incondicional y lo daba todo, eso sí, si no le cogía manía por alguna razón. Era un espíritu de amor, generosidad y servicio. Dios la bendiga abundantemente.
Lucía Toro Arango
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"Mis recuerdo con Alcira son de verdad lindos.....de amabilidad y compañía...cuando viajábamos a Buga para vacaciones y ver a los tíos....y la primas, las amigas, en fin...nos dejaban unos días donde la tía Ana Rita...el solo hecho de llegar y ver esa casa tan grande, bonita y llena de lujos...nos emocionaba....allí estaba Alcira....quien era la que nos ponía en la mesa los alimentos y nos decía los niños del tío Jaime....en especial recuerdo una tarde....nos llevó al cine....al María Cristina....imagino que era la persona dispuesta para hacerlo....luego con los años, cuando empezó su enfermedad....compartí en dos o tres ocasiones conversaciones muy agradables....me contó historia de sus vida y del tiempo que estuvo en Bogotá....y supe lo agradecida que vivía con su familia de crianza y el cariño que recibió de mi tía Ana Rita y decía que toda la familia Arango Mejía la había acogido con cariño y respeto....de verdad mi cariño por Alcira fue siempre de corazón...."
Beatriz Mejía Restrepo
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"Yo recuerdo también a Alcira con mucho cariño; recuerdo que donde mi tía Ana Rita hervían una olla grande con leche y ella seguro me veía a mi tan flaquita y me daba un pocillo grande de leche con banano. Alcira regañaba a Lucho porque me molestaba, el me mojaba con los tarritos de zacarina de mi tía, ero eso era como un juego de niños que teníamos lucho y yo, ella siempre nos estaba cuidando. También recuerdo que Alcira tenía un espíritu libre y mente abierta, cuando participó acá en Pereira en un encuentro juvenil a nivel de latinoamerica, tenía buena vibra; un abrazo desde el plano donde se encuentre
Amparo Mejía Restrepo
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De Alcira no tengo muchos recuerdos recientes quizá porque los momentos que ella me dedicó, se dieron cuando apenas yo era una bebé, Alcira cuidó de mi mamá durante el puerperio cuando yo nací. Lo que si tengo muy claro por muchas vivencias con ella es que fue una mujer abnegada, servicial, desinteresada y alegre. Nos amó incondicionalmente a todos quienes fuimos su familia. Solo me resta decirle GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.
Amanda Mejía Arango
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"Alcira fue una mujer de gran corazón y de entrega.
Tengo gratos recuerdos de ella, especialmente en unas vacaciones en Barragán cunado yo estaba muy niña, tenía 5 años. Esa experiencia jamás se me olvidará".
Alicia Mejía Arango
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"Gratos recuerdos nos trae a la memoria nuestra querida Alcirita, su alma noble, el espíritu bondadoso y el don de servicio que siempre le acompañaron; dejó huellas imborrables en todas las personas quienes pudimos disfrutar de su compañía y afecto, así como de sus conversaciones amenas y entretenidas sobre diferentes situaciones de la vida y su cotidianidad.
Siempre su recuerdo tendrá un espacio especial en nuestras mentes y corazones. Donde estés, Alcirita, gracias mil !!!!!!!
María Elena Arango Arbeláez
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"Alcira: averiguar sobre tu familia biológica y su procedencia y elaborar esta crónica es mi homenaje de reconocimiento por todo lo que nos diste". "El esfuerzo de muchas horas de trabajo investigando los archivos parroquiales y también notariales al igual que la tradición oral de la familia en busca de los orígenes de Alcira, es compensado con la satisfacción que siento hoy día. Siento mucha paz interior por llenar el vacío ajeno, el que Alcira sintió toda su vida y del que en cierta forma los más cercanos a ella fuimos partícipes, por no saber de su pasado y el de su familia. Este trabajo hace parte del gran objetivo de mi vida y de la misión, que seguramente Dios me ha encomendado, saber de nuestros ancestros, los que nos mostraron el camino y nos dieron alas....... muy seguramente a nuestros descendientes les quedará fácil mirar hacia el pasado y saber de donde vienen......eso se llama llenar el vacío genealógico".
Bernardo Mejía Arango
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MOMENTOS CON ALCIRA
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